Tarta de frutas con crocanti
Ingredientes:
- 180 gr. de azúcar
- 5 huevos
- 70 gr. de harina de maíz
- 70 gr. de harina
- sal
Para el crocanti:
- 100 gr. de azúcar
- zumo de limón
- 100 gr. de almendras crudas
- aceite
Para la decoración:
- 300 gr. de nata líquida
- 250 gr. de mermelada de albaricoque
- 2 cucharadas de zumo de limón
- 4 rodajas de piña en almíbar
- 1 vasito de kirsch (licor de frutas)
- fruta al gusto
Preparación:
Separamos las claras de las yemas y batimos durante 10 minutos el azúcar con las yemas. Añadimos la harina de maíz y la harina tamizadas. Mezclamos bien. Batimos las claras con un pellizco de sal a punto de nieve e incorporamos con cuidado a la masa. Vertemos en un molde rectangular untado con mantequilla y metemos al horno a 180ºC de 40 a 45 minutos. Ponemos a derretir 100 gramos de azúcar en una sartén junto con una cucharada de zumo de limón. Añadimos 100 gramos de almendras y vamos mareando hasta conseguir un bonito caramelo. Lo volcamos sobre el mármol, untado con aceite y separamos rápidamente las almendras. Una vez frías las pasamos por el mortero para obtener el crocanti. Montamos la nata, añadiendo una cucharada de azúcar. Cocemos la mermelada con 2 cucharadas de agua, apartamos del fuego y añadimos 2 cucharadas de zumo de limón. Pasamos por el chino y perfumamos con un poco de kirsch. Cortamos el bizcocho por la mitad a lo largo. Untamos la mitad inferior con parte del preparado de mermelada. Cubrimos con nata montada. Repartimos por encima 4 rodajas de piña muy picadas y tapamos con la segunda mitad del bizcocho. Pincelamos la superficie con otra capa de mermelada y kirsch. Terminamos con nata montada por todo el pastel. Adornamos la superficie con frutas en hilera. Cubrimos los lados con el crocanti y abrillantamos la fruta con el resto de mermelada líquida.






Comentarios 1
Fabiola Flambury