Ingredientes:
- 400 gr. de harina
- 4 huevos
- 20 gr. de mantequilla
Para el relleno:
- 100 gr. de carne picada de cerdo
- 1 cebolla
- 1 huevo
- 1 diente de ajo
- 1 tomate
- 1 rebanada de pan
- 3 cucharadas de leche
- 1 copita de jerez
- aceite
Para la bechamel:
- 2 vasos de leche
- 40 gr. de harina
- 60 gr. de mantequilla
- 40 gr. de queso rallado
- 1 pizca de nuez moscada
- sal
- pimienta
Preparación:
En una superficie lisa formar un volcán con la harina. Bate el huevo y viértelo en el orificio del volcán junto con la mantequilla y medio vasito de agua. Mezcla, forma una bola y deja reposar tapada una hora en la nevera. Mientras, pon la rebanada en un plato hondo y remoja con la leche. Añade el jerez y deja que vaya absorbiendo el líquido. Por otro lado, pela y pica finalmente la cebolla y el ajo. Pela, trocea y tritura el tomate. Calienta el aceite en una sartén y echa la cebolla y el ajo. Sofríe hasta que empiece a dorar. Añade la carne picada. Incorpora la rebanada remojada y el tomate. Casca, bate y añade el huevo. Salpimienta. Fríe unos minutos y reserva. Retira la pasta de la nevera y extiéndela sobre una superficie lisa y espolvoreada de harina. Córtala y forma dos partes iguales. Coloca sobre una parte de la pasta montoncitos pequeños de relleno. Tapa con la otra parte apretando en los bordes de cada montoncito. Corta por los bordes y apriétalos para que no se abran. echa los raviolis en una olla con 3 litros de agua hirviendo. Cuece 15 minutos, pásalos por agua fría, escurre y reserva. Dora la harina en una sartén con la mantequilla caliente. Vierte la leche poco a poco. Sazona con sal, pimienta y nuez moscada. Cuece hasta espesar. Pon los raviolis en una fuente para el horno y cúbrelos con la bechamel. Espolvorea con el queso y gratina en horno caliente unos 10 minutos.